Las "Experiencias extracorporales" son percepciones conflictivas de los sentidos


En un experimento muy creativo se le ponía al voluntario unos lentes que proyectaban su propio cuerpo filmado desde 2 metros atrás (se veía a sí mismo de espaldas). Al tocársele la piel, el sujeto lo "sentía" en el avatar proyectado, 2 metros delante de su cuerpo. Dentro del cerebro, revelaban los sensores, la región dedicada al tacto creía que el cuerpo estaba donde la región de la vista lo imaginaba, pero el alma no se salía del cuerpo en ningún momento.